¿Qué está pasando en los baños del centro comercial?
Por: David Felipe Montoya Acosta
Camilo de 19 años, Luis de 26, y TransmiGaybgta, quien oculta su identidad en twitter, narran cómo es su experiencia teniendo relaciones sexuales homosexuales en baños públicos, práctica denominada Cruising, en la Ciudad de Bogotá.
Mi lugar favorito para hacer Cruising son los baños de los centros comerciales, en especial los del Avenida Chile, hay días en los que llego a eso de las tres de la tarde, entro y me siento a masturbarme en un cubículo que quede viendo a los orinales, y cuando veo que hay alguien que también lleva buen tiempo en el baño salgo a ver si quiere jugar, narra Camilo.
“Los baños que están dentro del Éxito, mantienen solos” dice TransmiGaybgta en su cuenta de Twitter, es imposible saber si el otro es gay o no, porque es un baño y todo el mundo entra ahí. Va más en la química, en las miradas, si el man se me hace al lado y los otros orinales estaban solos, es porque viene buscando algo.
Son un par de experiencias que permiten ver como son algunos de los modos de actuar de las personas que llevan a cabo estas prácticas denominadas Cruising, las cuales son más populares de lo que parecen. Existen páginas web o perfiles anónimos en twitter que se encargan de cubrir los lugares más populares para hacerlo.
“Estuve en Centro Mayor, la verdad me lleve una gran decepción, había demasiada vigilancia, cuando no entraban los vigilantes, entraban las señoras del aseo, creo que boletearon tanto los baños que ya no se puede hacer nada, que lastima!”, dice TransmiGaybgta, quien tiene más de noventa y nueve mil seguidores en twitter.
Estas prácticas no se limitan a los baños públicos de los centros comerciales, cualquier espacio público puede servir para dar paso al Cruising, baños de discotecas, parques, paradas de buses, transmilenios, bibliotecas, lo único que se necesita es que se encuentre al otro con ganas, dice Camilo y también lo comenta Juan en el siguiente audio.
También dice que lo que más le atrae de hacerlo, en estos espacios, es la sensación de adrenalina, “sentir que nos pueden pillar me excita mucho… Y es que es fácil. Solo son hombres entrando al baño de hombres, si entrara una mujer seria diferente porque no es un espacio para ellas”.
Camilo da a entender que la estructura de algunos de los baños públicos parece pensada para este tipo de encuentros, pone de ejemplo los baños del tercer piso del centro comercial Santafé, aquellos que quedan junto al restaurante Andrés Carne de Res, “los orinales quedan atrás de los cubículos y frente a ellos hay dos cubículos más, donde a uno no le sirve la puerta”.
Al parecer existe toda una nueva forma de percepción y uso de los baños públicos, donde incluso se podrían ver nuevas formas de comunicación en pro de lo que sea que busque el individuo que los usa y para qué los usa. Situación que parece tomada de una película pero qué pasa con frecuencia y puede estar pasando a su lado.
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