Gracias a lo evidenciado en la campaña política de Barack Obama, quién hizo presencia en medios digitales como Facebook y Twitter, y sin estar seguros que fue su efectividad quien lo llevó a ganar las elecciones del 2008; sí contribuyo en que las redes sociales se hayan convertido en un común denominador en el mundo del mercadeo político, sobre todo como estrategia para atraer a los nuevos votantes. Lo llamativo de las redes sociales es que se puede interactuar con los votantes generando más interés y de este modo conocer sus opiniones y apreciaciones frente a determinado tema así tener un concepto más real y de primera de lo que quieren y necesitan. Tal y como sucede con las empresas de consumo masivo que a través de las redes sociales y sitios web invitan a sus consumidores a opinar sobre sus nuevos productos, dando paso a una comunicación participativa.
“Los políticos están reconociendo que la relación con los votantes es de dos vías, no sólo es hablar sino también oír”, indica el director ejecutivo de la agencia de comunicaciones Gravitas, Miguel Silva.
Sin embargo, no siempre los que más esfuerzos invierten en las redes sociales ganan, pues no basta con sólo estar en la red sin un mensaje claro que despierte emociones e interés, un ejemplo claro lo vivió Al Gore en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, quien se dió cuenta del poder de las redes sociales (antes que Obama) e implemento una Página Web donde los visitantes podían ver lo que estaba haciendo en su campaña en tiempo real. Según Germán Medina, experto en mercadeo político, Gore perdió porque no despertaba suficientes emociones y el voto es algo más emocional que racional.
“Lo que se debe lograr en una campaña es encontrar esa conexión entre lo que quiere la gente y lo que representa el candidato. Ahí está la clave”, afirma Darío Vargas, socio de Dattis Comunicaciones.
En Colombia, Antanas Mockus, se ha conectado más efectivamente con la comunidad virtual que cualquier otro candidato. Su mensaje ha sido calificado por expertos y analistas como renovador, llamativo y emotivo; ha logrado vincular a más de 500.000 seguidores en Facebook, lo que lo convierte en el sexto político con más fanaticada por este medio a nivel mundial. “Esto Lo ha conseguido debido a su mensaje, a la manera de comunicarlo, a su reputación y a la voluntad propia de expresión de sus seguidores, quiénes aparentemente han sentido una conexión con él”, dice Miguel Silva, de Gravitas.
Por su lado Juan Manuel Santos entendió este fenómeno de las redes sociales y replanteo su campaña con el lema “Trabajo, trabajo y trabajo” y a través de Facebook, Twitter, Hi Fi, You Tube, entre otros invitan a la comunidad a acercarse al candidato. En la semana de relanzamiento alcanzó en facebook más de 115.000 seguidores, incrementando en cerca de 20.000.
Hay que tener presente que así como se puede crecer y tener popularidad en las redes también hay el riesgo de caer por malas acciones que molesten a los votantes. Pues los candidatos no son los que dominan los contenidos, son las personas quienes los construyen.
Es de cuidado este medio es por eso que las campañas deben ser reforzadas con otros medios como televisión, radio, prensa, lo importante es que haya relación y coherencia entre ellas. Así se puede alcanzar más audiencia e impacto.
Antes de Ingresar a participar en las redes sociales los candidatos deben saber muy bien lo que quieren mostrar para no llegar a hacer una campaña contraproducente.