Sucre pide justicia por caso de falsos positivos en el corregimiento de Chochó.
Presentado por: Brihan Angulo (@brihan_anhe) y Nataly Toloza (@natydelmarr)
El 25 de julio del 2022, en el municipio de Chochó, Sucre, tres familias fueron víctimas de un atroz crimen por parte de un integrante de la Policía, un hecho lamentable que llenó de dolor a muchas familias y se podría decir que a toda Colombia.
En el municipio de Sampués, a 10 Kilómetros de Chochó, sicarios del ‘Clan del Golfo’ asesinaron a Diego Felipe Ruiz, un policía que se encontraba realizando labores de control en una panadería. El uniformado de 25 años de edad es la última víctima del plan pistola que ejerce este grupo criminal. Denunció la congresista Mafe Carrascal.
A causa del asesinato del patrullero, se desplegaron retenes y operativos por todas las zonas, para así poder ubicar a los implicados del crimen. Por otro lado, en la vía Las Palmas se encontraban dos jóvenes: Jesús Díaz de 18 años y José Arévalo de 22 años, practicando stunt, que consiste en hacer trucos con motos.
La Policía llegó de manera inesperada al lugar donde se encontraban los jóvenes. Según testigos Jesús y José, al verlos, pensaron que les iban a quitar las motos y huyeron del sitio, detonando la ira de los agentes, reaccionando agresivamente, puesto que les dispararon y una de las balas impactó en uno de ellos. Así lo contó Luis Villalobos a Noticias Caracol.
José Arévalo contó a Noticias Caracol que decide llevarlo donde la madre y se dirigieron rápidamente al hospital más cercano, pero de camino se cruzaron con un retén y este los detuvo, señalándolos de ser los responsables de lo ocurrido en Sampués. Varios videos corroboran que los jóvenes fueron doblegados y agredidos físicamente.
Alrededor de las 6 de la tarde, Carlos Ibáñez, un vecino del sector, había prestado servicio en la Policía y conocía cómo debían ser los procedimientos, Por ende, intervino en defensa de los jóvenes, al hacer esto fue señalado de ser cómplice y obligado a tirarse al piso, minutos después, los subieron a una camioneta blanca, siendo la última vez en ser vistos en la zona.
La camioneta se dirigió por la vía que conduce a Corozal, según reporte de la Policía; el rumor de la captura llegó a todos los habitantes del sector, en ese instante la familia se enteró de lo sucedido e inició la búsqueda desesperada. El hospital fue al primer lugar al que se dirigieron, suponiendo que Jesús estaba allí con una herida de bala.
A los pocos días, fueron hallados y reconocidos los cuerpos de los 3 jóvenes, quienes presentaban impactos de bala en la cabeza y pecho, la Fiscalía capturó e interrogó a los patrulleros que acompañaban al coronel Núñez ese día. Según uno de los subalternos:
“Cuando veníamos por el camino, el señor coronel le dio el primer disparo a uno de los sujetos que estaba herido. En ese momento nosotros quedamos atónitos, no sabíamos qué hacer. Él cogió y le dio otros dos tiros y también a los otros dos que estaban ahí”
El coronel Núñez, tras haber asesinado a sangre fría con su arma de dotación, escapó del país rumbo a México, llevaba 22 años en la institución como comandante operativo de seguridad ciudadana. Según Éver Núñez, hermano del coronel en una entrevista de Blu Radio, la salida fue por amenazas del ‘Clan del Golfo’ y no por estar evadiendo la justicia.
Días después, se entregó en México y fue trasladado a Bogotá, donde un juez decidió enviarlo a la cárcel La Picota; sin embargo, no aceptó los cargos de homicidio agravado, privación ilegal de la libertad y ocultamiento, alteración o destrucción de elementos materiales probatorios. En declaraciones de la Fiscalía.