Diseño Sonoro

Del oído al sentido – El poder del sonido en el diseño de experiencias

En el entorno digital, no hace falta que se nos diga explícitamente que algo va mal: en ocasiones, un sencillo “Bip” lo suficientemente agudo sirve para ponernos en alerta. O al contrario una melodía suave puede llenarnos de paz más que una imagen agradable. El sonido más que acompañar la experiencia, cumple una función transformadora. Desde el sonido “clic” en la pantalla que pasa aparentemente desapercibido, hasta la música que crea la atmósfera perfecta en un videojuego, el audio tiene el poder de dar “vida” al mundo digital.

En el Diseño Experiencial, el sonido es un aliado clave para generar conexión, para llamar la atención y emocionar a los usuarios. Es por eso qué entender como funciona ha dejado de ser una labor exclusiva de músicos e ingenieros de sonido, en la actualidad es una habilidad clave para quienes creamos experiencias interactivas.

¿Por qué el sonido importa?

El sonido en sus diferentes versiones activa regiones del cerebro que se conectan con la emoción, la memoria y las acciones . No por nada, en ocasiones escuchar el “ringtone” del celular nos puede hacer sentir tensión o que ciertos sonidos nos generen mayor confianza que otros. El cerebro humano proceso el audio prácticamente de manera automática y con una velocidad impresionante, provocando respuestas físicas y emocionales incluso antes de hacer conciencia de esto.

En el diseño de experiencias digitales, el sonido puede ser tan importante como la correcta selección de colores y tipografías. Un diseño sonoro bien pensado puede dar claridad sobre el correcto o incorrecto funcionamiento de un sistema, fortalecer la identidad de marca o llevar al usuario a desarrollar algún tipo de acción en particular.

Aún si la interfaz es silenciosa, el sonido sigue “estando presente” a manera de expectativa. Cuando algo que debería sonar no suena, lo percibimos. Y si suena mal. Lo sentimos aún más.

Diseñar con los oídos: principios del diseño sonoro

Cuando hablamos de diseñar, hablamos del proceso estratégico de elegir los elementos que hacen parte de una composición, en el caso del diseño sonoro, este proceso va más allá de elegir efectos de sonido bonitos, incluye cuando un sonido debe estar presente, su volumen o intensidad e incluso el silencio. Algunos principios clave del proceso son:

  • Función: Cada sonido (o silencio) debe tener una razón de ser, si no tiene una función clara, es solo ruido.
  • Coherencia: El sonido se debe alinear con la identidad visual, de cierta menara, debe ser la traducción auditiva de la identidad de marca, además de tener relación con su personalidad. No tiene sentido un sonido “clic” robótico en una app de una escuela de Yoga.
  • Acompañamiento: El audio debe ser complemento de la navegación, no debe interrumpir. Un buen deseño de sonido es el que hace falta si desaparece; pero mientras está presente no estorba.
  • Control de usuario: El usuario debe estar en capacidad de activar, desactivar o gestionar el sonido es parte del respeto por la experiencia del usuario.

Diseñar con los oídos es entender que el sonido no se debe imponer, más bien se sugiera. Bien usado, el sonido potencia la experiencia volviéndola profunda e inmersiva.

Así lo hacen actualmente

Algunas aplicaciones, usadas por grandes cantidades de usuarios, no solo tienen un diseño visual atractivo, también se escuchan de manera genial.


Duolingo: Nuevamente traemos al búho verde como referencia (que podemos decir, lo hace muy bien) cada sonido en la app está ha sido incluido para reforzar la sensación de avance de usuario. Suaves tintineos que acompañan los aciertos, y tonos más graves se presentan al cometer errores esta combinación de sonidos es un sistema que retroalimenta al usuario instantáneamente y le ubica en su experiencia aún sin mirar la pantalla.

Pokémon Go: El uso del sonido es esencial para explorar el mundo y el juego. Alertas sutiles nos avisan cuando aparece un Pokémon, y los efectos sonoros únicos para cada Pokémon generan una conexión emocional más allá de lo visual, conectando de igual manera a los usuarios nativos del App (nuevos jugadores de Pokémon) que a los usuarios que migramos de las plataformas de videojuego (principalmente del GameBoy).

Se escucha, y también se siente

Vivimos en un mundo saturado de pantallas y estímulos visuales de todo tipo, aquí el sonido está en capacidad de colarse (si podemos usar la palabra) en el centro de la experiencia. El diseño no se trata solamente de aspectos estéticos: es una herramienta de seducción, conexión y emoción. Ya sea un “ding” de acción realizada con éxito o una alerta que nos indica que algo anda mal, los sonidos bien planeados facilitan que las experiencias digitales se sientan humanas.

Y como en todo proceso estratégico, el diseño sonoro se estudia, se experimenta y construye. En las nuevas experiencias de interacción digitales o no, inmersivas o híbridas entender el poder del audio marca la diferencia entre un producto funcional y uno memorable.

Comments are closed.