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Si usted ha desarrollado interés por la moda circular durante los últimos meses, es probable que haya escuchado de la Antiferia. De no ser así, lo más probable es que falte poco para que lo haga, o mejor aún, asista a una de sus ediciones.
Hace poco empecé a preguntarme por sus orígenes, pues soy asistente frecuente de ella. ¿De dónde surge la idea de esta iniciativa, que siempre está llena de ropa hermosa, mujeres empoderadas y buenas vibras?
Siendo realizada una vez al mes, este evento tuvo sus inicios pensado como algo totalmente diferente a lo que es hoy. Así lo cuenta Annie Agredo, su fundadora y administradora.
La historia se remonta a hace aproximadamente 4 años, cuando Annie, después de regresar de 1 año de estadía en Estados Unidos, inicia oficialmente su propio emprendimiento: Tons, haciendo alusión a las toneladas de desperdicio que se genera en el mundo de la moda.
Empezó con Upcycling (aprovechamiento de desechos textiles para fabricar nuevos), para luego dedicarse de lleno a la venta de ropa usada. Y aunque el proyecto parecía pequeño, ya le permitía a su creadora costearse la vida en Bogotá, viajar y además, ahorrar dinero para más adelante. Pasaron los meses, y pronto Tons necesitó un lugar en donde establecerse.
Con la idea de hacer la inauguración del punto físico de su tienda, ubicada en Chapinero Alto, Annie decidió invitar a 5 tiendas de ropa usada. Para sorpresa de todos, debido a que para la fecha en que se realizó (enero de 2021) aún había cuarentena estricta y toque de queda, el evento fue todo un éxito.
Algunos de sus seguidores recordamos ese primer evento. Era una dinámica nueva en el mundo de la ropa de segunda mano, pues de lo virtual por fin pasábamos a lo presencial, de un logo, a personas reales. Yo recuerdo estar mirando constantemente las redes sociales, esperando videos y fotos del evento, ya que no pude asistir.
Pero, mientras a mí me consumía la curiosidad, a Annie la consumía el miedo.
Tenía miedo de que nadie fuera, que las tiendas perdieran dinero y tiempo en ir hasta allá…, menciona ella, sin embargo, todas las tiendas lograron hacer buenas ventas en los dos días del evento, lo que la motivó a continuar con la iniciativa, y transformarla en algo más.
Llegó febrero, marzo, abril… Así fueron pasando los meses, y los seguidores, no solo de Tons, sino también de los emprendimientos de Bogotá, empezaron a esperar con ansias el anuncio de la próxima edición y sus invitados. Las medidas de bioseguridad eran más flexibles, y era frecuente escuchar de “las ferias de garaje de Tons” entre la comunidad.
Para octubre, el nombre y perfil de Instagram estaba decidido: Antiferia. Una iniciativa que es ANTI producción masiva y explotación laboral.
Después de haber realizado la edición de noviembre en Udara Coworking, y que como cada mes, aún más personas se sumaron a la iniciativa, Annie decidió que éste sería el lugar idóneo para realizar la última feria del 2021. Tenía grandes planes para diciembre, el mes de mayor consumo de ropa. El panorama parecía indicar que sería un rotundo éxito.
Y por supuesto que lo fue.
Con 25 emprendimientos invitados, y una casa de 3 pisos alquilada para 5 días de evento, la Antiferia resultó siendo un evento de asistencia masiva: llegamos al evento y el miércoles fue una locura, los asistentes estaban haciendo fila desde las 9:30 am, el evento arrancaba a las 10.
Recuerdo haber llegado a las 10:30, al lugar no le cabía una sola persona más. Había ropa en todos lados, buena música y un ambiente que me hacía querer quedarme allí un buen rato. Si así fue el miércoles, no me imagino el sábado, me dije a mí misma. Escuché al final del evento que varias tiendas se quedaron sin inventario.
Enero, febrero y marzo de 2022 no decepcionaron, de hecho, parece ser que cada vez va más gente. Annie se siente feliz de decir que desde el principio, la iniciativa ha tenido gran acogida por el público. Esto, claro, sin dejar de lado los grandes retos que implicó crear un proyecto así desde cero.
Ha sido una trayectoria llena de nuevas experiencias que han traído consigo un gran aprendizaje. Lo que empezó en enero de 2021 como una loca idea, hoy le permite a Annie decir con orgullo que este es su trabajo de tiempo completo, y no lo cambiaría por nada.
La comunidad que se ha construido alrededor del proyecto es la muestra de la sororidad y apoyo mutuo entre mujeres, esto, teniendo en cuenta que son ellas quienes lideran la mayoría de emprendimientos.
Así pues, la moda circular no solo ha permitido proponer nuevas maneras de consumo, sino que también ha potenciado nuevos modos de trabajo, que les permite a las jóvenes emprendedoras contrarrestar la falta de oportunidades.
Por ahora, Annie se encuentra planeando las próximas ediciones de la Antiferia, y yo espero con ansias poder asistir a todas, ya que sin duda estarán llenas de mujeres poderosas y ropa espectacular, dos de mis más grandes pasiones.