Por: Jorge Andrés Pedroza Camacho. jpedrozac1@ucentral.edu.co
“La Tía”
Brenda es una mujer de 27 años, que se caracteriza por lo sociable que puede llegar a ser, con una personalidad muy alegre que logra conectar con cualquier persona que esté dispuesta a entablar una conversación sobre cualquier tema. El apodo de “La Tia” se lo puse por allá en el 2021 cuando entramos a la Universidad, desde el primer momento mostró un carácter lo suficientemente fuerte para no dejarse llevar en situaciones que se pueden considerar insignificantes.
Logo de Voces en Juego
Un amor a primera vista
Su regalo de cumpleaños número cinco fueron unos pequeños patines, algo que marcaría su destino por el resto de su vida. El apoyo de su padre fue fundamental para que Brenda encontrara la razón para madrugar cada fin de semana durante los próximos 20 años, el patinaje se presentó como un hobbie que sacó a relucir su talento y la capacidad de resiliencia frente a las caídas. Un deporte competitivo que se encargó de mantener su cabeza enfocada en luchar hasta el último momento, instinto que más adelante le serviría para entender que nunca es tarde para empezar de cero y ponerle el mismo amor a cada cosa a la que se dedique.
Su adolescencia fue clave para abrir su mente y comenzar a pensar en grande, Brenda comenzó a practicar con tanta constancia que las pistas se quedaban cortas frente a sus ganas de comerse el mundo. Rutinas estrictas que con el tiempo se convirtieron en un día a día, pero siempre quedó esa chispa más allá de la monotonía, la misma que la tenía pensando en un futuro brillante en el deporte que ama.
Collage de fotos de Brenda Bustos – Realizado por Jorge Andrés Pedroza
Dos vidas en una
Muchas veces en la vida tenemos amores tan fuertes que pueden llegar a afectarnos, pero andamos tan concentrados en amar que perdemos la noción del daño que nos está causando tanto en lo mental como en lo emocional, y esto le pasó a Brenda en medio de una de sus carreras.
Aunque el patinaje es un deporte muy atractivo, también puede llegar a ser muy peligroso, la velocidad a la que se desplazan sobre unas delgadas ruedas es impresionante, en medio de una competencia un pequeño fallo del cual no se tiene conocimiento la hizo tener un aparatoso accidente que fue la estocada final de su trayectoria deportiva, aunque no dejó de practicar de inmediato, si la puso a reflexionar sobre todo lo que conllevaba el dedicarse en este ambiente y seis meses después de aquella caída llegaba la vida universitaria que tanto había pospuesto.
La comunicación una oportunidad
Comenzar de cero no es sencillo para casi nadie, pero Brenda se encuentra entre ese grupo de personas que se adaptan fácil a todo lo que se le presenta en la vida, la comunicación social llegó como esa oportunidad para no abandonar esa disciplina que había practicado por tantos años. El periodismo deportivo se convirtió en una de sus pasiones y en la Universidad Central encontró esa oportunidad de oro para usarlo a su favor y mostrarlo ante el mundo con la relevancia que se merece.
Actualmente Brenda cursa séptimo semestre de comunicación Social y periodismo, día a día trabaja en su sueño de ser una periodista deportiva que hable sobre estos deportes a los que la gente no acostumbra a ver, una causa noble que la hace llegar a cada clase con el mayor entusiasmo por aprender.
Foto durante la entrevista de Voces en Juego – Tomada por Sarai Sofia Angarita Parra
Si disfrutó esta primera parte de la crónica, lo invitamos a seguir el recorrido completo, desde sus inicios en el deporte con el regalo de unos patines a sus cinco años hasta su llegada a la Universidad Central como estudiante de la ECEP. Todo contado por ella misma, con ese estilo único que la caracteriza, en el cuarto episodio de Voces en Juego. Un relato de resiliencia que vale la pena escuchar de principio a fin.
Recuerden que pueden ampliar todo nuestro contenido en nuestras redes sociales Instagram, TikTok y Youtube, además de leer todos nuestros artículos en la página de Concéntrika Medios.