Como ya es sabido e incluso se ha mencionado en artículos anteriores, en eventos masivos las marcas quieren destacarse con su publicidad y lograr la mayor cantidad de impactos posibles, Este no sólo es el atractivo del famoso evento del Super Bowl, que permite ser visto por una gran cantidad de personas sino que además invita a que las marcas que quieran dejar su huella se destaquen por presentar spots de alta calidad e ingenio.
Para ello traigo a colación un spot de la marca Volkswagen y de su vehículo Pasat 2012, titulado “The force” y presentado oficialmente al público durante este majestuoso evento. Con este comercial no sólo buscó destacar la calidad de historia y producción del mismo, sus locaciones, un presupuesto desorbitante o su libreto, en realidad lo interesante de este spot es su punto de giro, puesto que nunca se sabe con certeza a qué tipo de producto busca referirse.
El comercial se desarrolla haciendo uso de la ingenuidad de los niños y personifica a uno de estos como el famoso personaje de la saga Star Wars: Darth Vader, además el comercial usa un elemento clave de esta película “the forcé” en castellano: la fuerza, que para el caso de la saga puede ser tanto negativo como positivo y la poseen los famosos Jedis, quienes al saber usarla de manera correcta tendrán el poder de manipular a través de ella objetos y dominar a sus enemigos.
El pequeño hace varios intentos por controlar dicha fuerza en elementos que hacen parte de su cotidianidad y en los que a veces llega a verse frustrado tras no lograrlo. Al final de la pieza y aún sin desfallecer intenta interactuar con el auto de su padre y finaliza sorprendido creyendo que logro dominar su poder, pero es justo aquí el punto donde se torna más interesante, no sólo se le da importancia al producto, sino que se resaltan algunas de sus cualidades, ya que este automóvil tiene la fabulosa capacidad de encenderse a control remoto; es lo que su padre hace y que el pequeño no ve y es también el momento en el que el comercial se torna lógico alrededor del producto sin perder la magia que viene desarrollando desde el principio del spot.
Nos encontramos entonces con una pieza agradable y completa que atrae y captura al público, aunque nunca revela el producto ni las cualidades de este de una manera directa, al contrario nos muestra una situación ajena, inocente y divertida que cumple con entretener y finalmente dar una información comercial.
Piezas como estás tienen varios elementos con los que los creativos pueden jugar, hoy en día los consumidores reclaman a gritos publicidad que enseñe, publicidad novedosa, perspicaz, llamativa más que informativa y comercial y como este hay muchos ejemplos de que los límites están cada vez más lejos de poder sesgar la creatividad, que no necesitamos exclusivamente destacar las características para lograr una pieza interesante.
Y lo que hace este spot encantador es el hecho de combinar el lado emocional con la comercialización del producto indirectamente