Por Sebastián Arias
Estamos a escasos días de finalizar nuestro semestre del periodo 2024-2, y con esto llega uno de los momentos más tensionantes para los estudiantes “la semana de finales”, ese espacio en el que cada uno de nosotros damos ese último esfuerzo para finalizar de la mejor manera este periodo académico.
Esta semana demanda un esfuerzo mayor, por toda la carga académica que lleva consigo, y aun más para aquellos estudiantes que a lo largo del semestre no han tenido las mejores calificaciones, por lo que se esfuerzan de la mayor manera posible para no perder algún espacio académico.
Cerca del final
Varios estudiantes cuentan que se sienten preocupados por este momento, pues muchos de ellos ven de 3 a 5 materias por semestre y usualmente este final del tercer corte es donde tenemos los trabajos más complejos porque es la recopilación de todo lo aprendido en el semestre.
Los estudiantes de la jornada nocturna mencionan que es muy difícil organizar los tiempos, ya que en la mayoría de las materias las entregas finales se desarrollan a partir de actividades grupales y todos tienen horarios diferentes y a veces el único espacio libre es la noche después de salir de clase.
Y además en estos momentos usualmente los grupos de trabajo tienden a discutir, y muchas personas no diferencian lo personal de lo laboral; lo que en parte dificulta aun más la realización de los trabajos y la consolidación de esta semana.
¿Cómo prepararse para la semana?
En el vox populi de esta semana hablamos con varios estudiantes sobre las técnicas que emplean para este cierre de semestre.
- Ana María García, estudiante de ECEP, dijo: “Dormir bien, para poder madrugar al día siguiente, priorizar las materias que más se dificultan manejar muy bien los horarios y los espacios en los que vaya a estudiar”.
- Carlos Pérez estudiante de la ECEP, nos mencionó que estudia mucho más, le mete más ganas a los trabajos y prioriza los proyectos más complejos.
Lorena Pérez, psicóloga Bienestar Estudiantil, nos menciona que para tener una buena semana debemos dedicar espacio para nuestro autocuidado, también generar técnicas que nos faciliten el estudio, además de realizar actividades con las que se puede controlar el estrés y la desconcentración.
Los estudiantes no deben dudar en comunicarse con bienestar ante cualquier dificultad que tengan, ellos están siempre dispuestos a apoyarlos y seguir un control si lo consideran pertinente. Para contactarse con estos profesionales, pueden acercarse a la Torre de Bienestar en la sede principal de la Universidad.
El patrimonio cultural no es solo una cuestión de infraestructura, conlleva unas construcciones sociales tanto en conjunto como individuales y no podemos dejar perder nuestra historia e identidad, ya que tenemos que tener en cuenta de dónde venimos para saber a dónde vamos.
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