William Fuquen
El pasado martes 20 de febrero se llevó a cabo la celebración del día mundial de la justicia social, esta declaración surge en un momento político crucial, que refleja el amplio consenso acerca de la necesidad de una fuerte dimensión social en la globalización, que permita conseguir mejores resultados y que estos se repartan de manera más equitativa entre todos.
Hablando con Fernando Dueñas, docente la Facultad de Derecho y Ciencias Económicas, Jurídicas y Empresariales y asesor del consultorio jurídico de la Universidad Central, nos relata que el término es demasiado amplio como para fragmentarlo, ya que se remonta desde las colonizaciones que se presentaron en América en 1492 con la vulneración de los derechos de las habitantes americanos, desde ese momento es una constante por la existencia en paz, armonía y justicia entre el ser humano, la persona y los ciudadanos.
El tema principal de la conmemoración de este año, el logro de la protección social para todos, es indispensable para construir sociedades más justas, inclusivas y equitativas, por lo que, ante los efectos de la crisis financiera y económica nos siguen golpeando; ahora, más que nunca, es importante que afrontemos este reto como ciudadanía.
En entrevista con Sebastián Sarmiento, estudiante de derecho de la Universidad Central, nos describe que la justicia social no tiene una definición única, pero siente que es un punto de encuentro entre la dignidad humana, la moral, la ética, el respeto, la empatía, reconocer al otro como igual.
Según la Cruz Roja colombiana, “la Declaración se centra en garantizar resultados equitativos para todos a través del empleo, la protección social, el diálogo social, y los principios y derechos fundamentales en el trabajo.” El logro de esta justicia social está también estrechamente vinculado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”.
La justicia social es un concepto complejo que abarca temas como la igualdad social, la igualdad de oportunidades, el Estado de bienestar, la pobreza, las reivindicaciones laborales, el feminismo, entre muchos otros, que tienen como norte común la construcción de una sociedad más equitativa y menos desigual.
Sebastián Sarmiento nos comenta que la justicia social en Colombia es muy importante debido a que el territorio colombiano lamentablemente ha tenido una historia enmarcada en el conflicto, en la violencia y la justicia social, al reconocer al otro como igual, que merece respeto, igualdad, equidad y derechos y no como un inferior. Es una herramienta fundamental para lograr salir del marco de violencia y progresar realmente como sociedad.
Una de las partes más controvertidas es el hecho de que la justicia social también nos hace iguales ante los criminales, tienen los mismos derechos que una persona del común y es donde, se llega a las deducciones de que algunos ciudadanos deberían tener menos derechos que los demás por sus actos.
Sebastian Samiento nos reafirma que la naturaleza humana está sostenida sobre la máxima de que estamos hechos para fallar, algunos suelen fallar más que otros, pero en que en su esencia somos la misma especie, el mismo género y al final del día, todos merecemos por lo menos dignidad, respeto y ser juzgados de la misma manera que todos.