Por Camilo José Celedón Oñate
Cada día se encuentran más opciones vegetales en los grandes mercados o pequeñas tiendas del país. Son opciones de alimento hechas 100% a base de plantas que pueden ser una alternativa para vegetarianos, veganos e incluso personas que quieran mejorar su salud.
Durante la pandemia por el Covid-19, las personas comenzaron a preocuparse más por su salud, decidieron cocinar en casa y buscar productos más limpios y con menos índices de colesterol o grasa animal. Encontraron la solución a su inquietud en alimentos con legumbres, vegetales y semillas,
La regla del mercado es clara: a mayor demanda, mayor oferta. Marcas como Pietran le prestaron atención a estos cambios y empezaron a ofrecer opciones de nuggets, pollo desmenuzado y hamburguesas vegetales. Las personas los estaban comprando y ahora el mercado se estaba volviendo más variado y quizá más verde.
Pero parece que tener este tipo de dieta y cuidarse termina siendo costoso, ya que estos productos terminan siendo algo caros para algunas personas. No es la regla general, como en la vida, existen productos con precios altos tanto como con bajos. Y si la motivación no es por cuidarse, sí lo es por probar algo nuevo o diferente a la monotonía.
Cuando probé por primera vez estas opciones vegetales, me llevé una sorpresa. Tal vez lo normalizado es sentir rechazo y desconfianza a lo no conocido. No fue mi caso, mantuve mi mente abierta a lo nuevo. Descubrí que no era tan malo como lo imaginaba y quizá eso fue lo que le pasó a muchas de las personas que decidieron probarlas.
Según la alcaldía de Bogotá hay más de cien restaurantes 100% a base de plantas. La mayoría de ellos se encuentran en la localidad de Chapinero. Ofrecen platos tradicionales completamente vegetales: parrillada, salchipapas, hamburguesa, churrasco o tacos. Esto sin duda ha sido clave en el aumento de consumidores.
Cabe resaltar, por ejemplo, el papel de Sabyi, una empresa de embutidos vegetales y que fue la primera (vegana) en participar en el Fritanga Fest 2022. Varios comensales demostraron que las proteínas vegetales no se quedaban atrás y que, por el contrario, llamaban la atención.
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