Por: Juliana García
Los casos de intolerancia van en incremento en Bogotá los últimos años, cada uno siendo más fuerte que otro y dejando peores consecuencias que los anteriores. Uno de los últimos casos conocidos es el de Juan Manuel Torres, quien fue asesinado a manos de un escolta armado.
Tirado en el suelo fue encontrado el hombre el viernes 9 de septiembre. Según Publimetro, el evento ocurrió en la calle 26 con carrera 100 muy cerca del aeropuerto, tras una fuerte discusión con un escolta que se encontraba circulando cerca al aeropuerto.
Se inició una riña y el hombre habría caído al suelo, ya estando ahí el escolta le propició otro disparo, la gente quería auxiliarlo, pero el escolta no permitía que la gente se acercara, El hombre que disparó tras cometer el crimen se sentó a seguir comiendo tranquilamente como si nada hubiera pasado, cuenta un testigo anónimo entrevistado por City TV.
Varias versiones existen sobre lo que pasó esa mañana de viernes. Según Publimetro la víctima llegó con otras personas a tomar un tinto, cerca de donde se encontraba el escolta. Se desató un riña y Juan Manuel golpeó a uno de los hombres de seguridad y este le respondió con una patada, tumbándolo al suelo para después dispararle y terminar con su vida.
Sin embargo, noticias Infobae logró dar con un video de una cámara de seguridad cercana que logró capturar en video lo sucedido. En la grabación se ve como ambos hombres entran a una discusión y tras varios golpes, el escolta saca el arma de fuego con el cual acaba con la vida de Juan Manuel Torres.
El escolta fue capturado por oficiales de policía cuando llegaron al lugar de los hechos, este fue retenido durante el inicio de la investigación, sin embargo, fue liberado a los pocos días del acontecimiento por un juez de garantías, quien consideró que no había pruebas suficientes para considerarlo un peligro para la sociedad.
El arma con la que se disparó contra Juan Manuel está registrada a nombre del gobierno, asegura la familia del fallecido. Por lo que podría involucrar aspectos legales de gran peso en el presente caso, pero que posiblemente represente dilatación y trabas en el proceso.
Su hermano afirma que Juan Manuel, era un padre amoroso, responsable, un ser humano servicial, amable y respetuoso, y que lamenta que un gran acto de intolerancia fue el que le arrebató la vida. El funeral se llevó a cabo el 11 de septiembre de 2022, donde los invitados incluían familiares, amigos y compañeros de trabajo, resaltando a su familia más cercana.
Recordarlo y hablar de él es muy difícil, comentan sus familiares, en este momento donde lo único que claman de manera colectiva es justicia por parte de las autoridades pertinentes y no enlodar su nombre con el objetivo de cerrar un proceso que tiene mucho por aclarar.