Por: Alejandra Jamaica
La educación en cada persona más que ser un derecho es un eje fundamental para el desarrollo humano, crecimiento personal y profesional.
Sentada esta ley en el artículo 67 de la Constitución Política de Colombia la cual se recita exactamente: “La educación es un derecho de la persona y un servicio público que tiene una función social; con ella se busca el acceso al conocimiento, a la ciencia, a la técnica y los demás bienes y valores de la cultura”.
Hoy en día vemos que la deserción escolar es una de las problemáticas más comunes en nuestro país, de un tiempo para acá, son más los jóvenes y adolescentes que se ven trabajando, que los que se ven estudiando y luchando por sus sueños.
¡No quiere decir que un joven que trabaje esté haciendo las cosas mal, No! simplemente que como todo en la vida, hay un orden para hacer las cosas, y lo más importante para que una persona salga adelante es la educación. Cuando una persona no cuenta con mínimo un bachillerato las posibilidades para trabajar son menos.
Según los indicadores presentados por el ministerio de educación, los peores indicadores de deserción escolar están en los grados primero de primaria y sexto de secundaria. En datos exactos en primera la cifra de deserción escolar está en el 1.56% y esto es algo alarmante, pues las generaciones que vienen no están siendo dirigidas correctamente.
El ministerio de educación realizó un análisis por zonas y localidades, para evidenciar en qué instituciones son las que hay más deserción escolar y más en cursos de primaria. De este estudio se evidencio que donde más hay deserción escolar es en las instituciones educativas del sur de la ciudad.
El abandono o alejamiento del sistema educativo formal antes de conseguir el título final es algo que sucede a diario, no solo en Bogotá, sino en muchas ciudades del país y como lo recalcamos anteriormente, según los estudios realizados es inconcebible ver que casi siempre es en la educación primaria.
La pregunta es ¿cuando un niño que están en cursos primarios se aleja del estudio, quien es el causante?, pues la conclusión es que un niño a tan corta edad, se sobreentiende que no está en la capacidad de decidir y tomar una decisión tan radical y determinante como estas.
Un joven ya es un caso diferente, ya que tiene un poco más de cordura y sabe las consecuencias que acarrearía si se aleja de los caminos educativos. Cuando un adolescente o joven conoce el valor del dinero, es decir “trabaja”, en algunos casos prefieren ganar que seguir estudiando.
Esta problemática es muy común, hoy en día es muy normal ver un adolescente en las calles trabajando y ganándose su dinero, pues como hay jóvenes que las circunstancias los obliga, hay otros que como se nombraba anteriormente, le encuentran más gusto al dinero que al colegio.
El mundo necesita profesionales, necesita gente preparada, nuevas generaciones llenas de conocimientos. La educación debe ser la motivación de todo niño, adolescente y joven, todo tiene su tiempo y si un joven primero se forma académicamente, profesionalmente será exitoso.
“QUEREMOS PADRES ESTRICTOS, PADRES CON PROYECTOS”.
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