Si bien es cierto el contenido de la programación de nuestra televisión se produce pero carece de responsabilidad en cuanto al contenido infantil se refiere. Un acto comunicativo que muy pocas veces tiene como objetivo  un propósito educativo y en el cual se tiene una percepción errada de los infantes  como consumidores y no como audiencia.

Audiencia que la única y gran característica en común es el imaginario con el que producen y desarrollan sus ideas; por esta razón el ejercicio de producir contenidos infantiles se puede decir que es un ejercicio en el cual recae una inmensa responsabilidad hablando en términos de lo que se produce, como se produce y de contenidos . Este ejercicio ha venido realizando estrategias validas para captar la atención de esta audiencia infantil.

La mejor manera es hablarles inteligentemente   y no pretender que los niños no saben o no hacen Ya que se comportan como seres activos frente a lo que ven. Y que todo producto audiovisual se realizará con tres importantes aspectos que impulsan a crear identidad en los niños. Emoción, pertenencia y aventura.


Y por otro lado tener en cuenta que Todo acto comunicativo debería encaminarse con propósitos educativos, que aporten a la formación del infante y lo informen. Pero lamentablemente la televisión no lo tiene. El objetivo podría verse mas como una consecuencia educativa. Sólo queda esperar que los canales le apuesten al contenido de la programación.

Undrexcore
andres montañez

Pinko
jean carlos  silva

Toma 7.0

Salir de la versión móvil