Alejandra González, estudiante de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Central, fue seleccionada entre 100 estudiantes del país, para hacer parte de la Escuela de Periodismo de El Tiempo. Ella ha sido periodista de ACN y compartió su experiencia durante las pruebas de admisión.
Por: Ángela María Pulido.
Es una joven tímida, muy tímida. Siempre se presenta respetuosa y sus profesores dicen de ella que es muy trabajadora, educada y una mujer inquieta por cuestiones relacionadas al aprendizaje. Cuando finalizó la asignatura de Prácticas I, la profesora Ángela Verge recomendó a todos los estudiantes de prácticas que se presentaran a la convocatoria de la Escuela de Periodismo. Alejandra no estaba convencida, pero lo hizo. Sabía que iba a ser un reto muy complicado. Otros compañeros suyos, muy talentosos, también lo hicieron. Todos los postulados son excelentes periodistas, así que no tenían nada que perder.
El primer reto que enfrentó fue escribir un artículo de 1500 caracteres acerca de por qué quería hacer parte de este reconocido medio. Además tuvo que adjuntar sus calificaciones de la carrera, la certificación que avalaba sus prácticas en caso de ser admitida, y algunos artículos que había realizado para que conocieran un poco de su trabajo como periodista.
Así se llevó a cabo la primera selección, Alejandra pasó. Lo supo cuando la llamaron para presentar la segunda prueba, sus ojos se iluminaron de emoción. Llegó el día, y decidida, se presentó en El Tiempo.
Durante la segunda fase Alejandra tuvo nervios, era la primera vez que nuestra periodista se enfrentaba a un reto como este, sin embargo estaba segura de sus capacidades y proyectó su convicción en cada prueba. Asegura que ha sido una experiencia enriquecedora, y que le dejó como enseñanza no dudar de sus conocimientos, comparte que la duda es un error que en reiteradas ocasiones nos lleva a la confusión:
“Hay que tener confianza en las capacidades, dejar lo mejor de uno en las pruebas y dejar un legado. Así lo hice y mis resultados fueron positivos”. Manifiesta Alejandra.
En la segunda fase nos cuenta que tuvo que competir con decenas de estudiantes de todo el país, de diferentes universidades y carreras, pues El Tiempo busca personas que escriban y tengan la destreza para hacerlo independiente de la carrera que hayan elegido.
La prueba más difícil para ella fue una prueba colectiva en el cual su grupo de trabajo estaba integrado por estudiantes de la Universidad de la Sabana y de la Universidad Sergio Arboleda. Cuenta que las estudiantes con quien trabajó tenían fortalezas en la parte digital, el manejo de plataformas para realizar infografías, mientras que ella sentía que tenía fortalezas en la redacción de textos, y en la optimización del trabajo en equipo.
Explica Alejandra que en esa fase se le pidió a cada grupo que de una base de datos seleccionaran los datos más relevantes para realizar una infografía que luego sería socializada. Al grupo de esta unicentralista les asignaron el tema de robo de celulares en Colombia. A pesar de los nervios, cuenta que utilizó sus habilidades en redacción para llevar a cabo su tarea de la mejor forma, cuenta que la competencia fue compleja pues cada estudiante que participó gozaba de distintas destrezas que podrían aportar a la Escuela de El Tiempo.
Una de las debilidades que sintió como unicentralista fue en el área digital y en el manejo de bases de datos, dado que las bases que la Universidad le había proporcionado durante su formación están orientadas a la construcción y redacción de textos. Afirma que lo que más la impulsó al realizar las pruebas fue demostrar que tenía destrezas para estar allí. Salió exhausta de presentar esta segunda fase, pues le llevó todo toda una jornada.
El día que supo que era integrante de la Escuela de Periodismo de El Tiempo, fue una mañana inesperada, habían pasado varios días luego de haber presentado la segunda fase. De repente recibió una llamada del director Andrés Garibello, de la Escuela de Periodismo, llamó a comunicarle que había sido elegida para realizar sus prácticas laborales.
Ese día se desbordó la felicidad en la casa de Alejandra, eran 14 cupos y ahora hacía parte del selecto grupo. Había pasado una prueba que desafiaba no solo sus conocimientos, también sus sentimientos, tuvo que aprender a dominar la presión y a erradicar cualquier miedo para continuar en esta competencia en donde su mayor contrincante era ella.
Sabe que lo que viene es difícil y eso la llena de disposición para aprender de esta experiencia que ha ganado, Considera necesario realizar su oficio como periodista fuera de las aulas de clase, pues la academia es un escenario teórico, pero que la práctica de ese conocimiento es una destreza diversa que conocerá a medida que realice sus prácticas en la Escuela de Periodismo de El Tiempo.
Inician pronto sus prácticas, el 24 de julio será el día que emprenda su viaje a Ítaca, ese camino estará colmado de peripecias, conocimiento, errores y triunfos, que con seguridad llenaran de conocimiento la carrera profesional de Alejandra. Sus prácticas finalizan el 19 de enero, en esta nueva etapa, será una mujer sobresaliente por su talento como periodista y sus valores como ser humano. ACN felicita a esta estudiante que con esmero, perseverancia y disciplina realizará en El Tiempo una reconocida labor.