Presentado por: Brihan Angulo (@brihan_anhe) y Nataly Toloza (@natydelmarr)

Un hombre bastante reconocido en el ámbito policial resultó con las manos ensangrentadas, llenando de dolor a muchas familias y se podría decir que a Colombia entera.

Benjamín Darío Núñez Jaramillo, oficial de la Policía de 42 años, nacido en Manizales y de grado ‘teniente coronel’, con 21 años al servicio, es especialista en administración policial, tiene un diplomado en derechos humanos, profesional en investigación criminal, experto en lavado de activos y dactiloscopia.

 

En el año 2015 fue promovido a ‘mayor’ luego de trabajar en la Sijin de Bogotá. En el 2017 recibió honores de la Alcaldía de Tenjo por su labor en la emergencia presentada en la vereda Chinche tras un incendio forestal. En el 2019 se desempeñó como comandante operativo de la Policía de Tránsito de Bogotá. Así lo describe El Universal al coronel Núñez. 

 

Parecía tener una vida casi perfecta, o así lo aparentaba este sujeto que con sonrisas y buenos actos se ganaba la confianza de los habitantes, ellos sin saberlo estaban cayendo en un lugar muy oscuro y perturbador. En el 2022 llegó al departamento de Sucre, donde se suponía que iba a aportar sus conocimientos, sin embargo, protagonizó varios escándalos internos.

 

El lunes 25 de julio, Núñez se disponía a cumplir con sus obligaciones en el trabajo, sin embargo, algo turbulento iba a ocurrir ese día. El caos comenzó en Sampués que queda a 10 kilómetros de Chochó, aproximadamente a las 2 pm, sicarios del ‘Clan del Golfo’ asesinaron a Diego Daniel Ruiz, un policía, este crimen hizo que sus compañeros reaccionaran.

Mientras este hecho sucedía, 2 jóvenes, Jesús Díaz de 18 años y José Arévalo de 22, salieron de una esquina Aledaña de la casa de Díaz hacia el corregimiento de las Palmas, así lo contó Luis Villalobos a Noticias Caracol, él se iba a reunir con ellos, pero su mamá le dijo que la acompañara, “ellos pasaron en la moto, él me mira y se echa a reír, esa fue la última sonrisa”.

 

Como de costumbre, Luis y Jesús se encontraron con sus amigos en la carretera de las Palmas para practicar stunt, consiste en hacer trucos con las motos, según dijo el padre de Luis a Noticias Caracol, él era fanático del cilindraje y cada que tenían tiempo libre se reunían. Sin saber lo que ocurría en Sampués, siguieron con sus actividades recreativas.

 

En ese mismo instante se habían desplegado retenes y operativos por todas las zonas, para ubicar a los implicados del asesinato del policía. Llegaron de manera inesperada al lugar en donde los jóvenes estaban compartiendo, según el informe de RCN, los jóvenes pensaron que les iban a quitar las motos y lo que hicieron fue huir. Esto detonó la furia de la Policía.

 

Aquí el terror empieza a tomar un papel muy importante, pues la Policía empieza a disparar y una bala le cae a Jesús Díaz, sin creerlo su amigo al ver esta escena escalofriante lo lleva a donde la madre, al ver esto fueron rápidamente al hospital junto con su hermana, pero se cruzaron con un retén y este los detuvo. Según cuenta lo sucedido El Tiempo.

 

La Policía empieza a agredir a José y luego los señala de ser los asesinos de lo sucedido en Sampués, eran las 6 de la tarde y fueron detenidos según testigos, al pasar por el sitio los vieron doblegados y los estaban agrediendo físicamente, cabe aclarar que hay varios videos rondando por las redes sociales, una pieza clave para encontrar al monstruo detrás del crimen.

 

Un ángel llegó, se podría decir, Carlos Ibáñez era un vecino de los jóvenes, había prestado servicio en la Policía y conocía cómo debían ser los procedimientos, por eso intervino en defensa, al hacer esto fue señalado de ser cómplice y obligado a tirarse al piso.

 

Horas más tarde, los jóvenes fueron encontrados baleados en la cabeza y el pecho. Ustedes se preguntarán y ¿aquí qué tiene que ver el coronel Núñez?

 

La respuesta es: mucho. Esa misma noche, el coronel Carlos Correa aseguró en una declaración mostrada por la Revista Semana, que los jóvenes estaban involucrados en el asesinato del policía.

Según investigaciones de la Fiscalía, el coronel Núñez sería quien disparó con su arma de dotación a los jóvenes a quemarropa, vídeos encontrados confirmaron este hecho, donde el coronel lo realizó con mucha sevicia y que intentó ocultar. 

 

Aunque es acusado por sus subalternos de haber asesinado a sangre fría y por haber pasado por falsos positivos a estos tres jóvenes del corregimiento de Chochó. Huyó del país vía a México, pero según el hermano Éver Núñez en una entrevista de Blu Radio, la salida fue por amenazas del ‘Clan del Golfo’ y no por estar evadiendo la justicia.

 

Tras volver al país, la Fiscalía le imputó cargos y un juez ordenó su reclusión en la cárcel La Picota de Bogotá, pero su defensa solicitó que lo trasladaran por razones de seguridad a la cárcel de Picañela, Ibagué, Núñez fue judicializado por tres delitos: homicidio, manipulación o alteración de elemento material probatorio y privación ilegal de la libertad.

 

¿Verdaderamente corría peligro en la cárcel de la capital o es un truco más?, ¿esta vez la justicia será imparcial y justa?, que no solo por el hecho de ser policía tenga que ser juzgado con otro rasero, ojalá veamos el tan anhelado cambio como lo prometió este nuevo gobierno de Gustavo Petro.

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Publicado por Concéntrika Medios

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