CANNABIS MEDICINAL: DEL ESTIGMA AL BOOM.



La mota, maracachafa, marimba, son algunos de los eufemismos que muy seguramente usted ha escuchado en la jerga colombiana para referirse a la marihuana, planta milenaria que no solamente se usa con fines recreativos, pues esta cuenta con múltiples propiedades que podrían ayudar a pacientes con enfermedades terminales o dolor crónico.

En el año 2021 entró en vigencia  la ley 1787 de 2016 ley que tiene como objetivo “crear un marco regulatorio que permita el acceso seguro e informado al uso médico y científico del cannabis y sus derivados en el territorio nacional colombiano.” 

Según el trabajo de investigación de Políticas Públicas el” Desafío que enfrenta el debate y la propuesta de la legalización del cannabis” de la Universidad de Chile, el cannabis es una planta milenaria que ha sido empleada en diferentes usos: rituales religiosos, medicina, alimentos, textil y recreación.

 Foto:Tomada de Semana

Fue recién en el siglo XX en que fue prohibida, convirtiéndose en un objeto de discordia política en casi todos los países occidentales. Desde la década de los noventa, han surgido, alrededor del mundo, varias iniciativas regulatorias que han despenalizado el uso del cannabis con fines terapéuticos, creando condiciones legales para su acceso. 

Un estudio de CNN en el 2016, revela que el cannabis  ayuda a tratar varias afecciones médicas cómo la epilepsia, el tourette, artritis,cáncer, glaucoma e incluso el cáncer, Este estudio también  afirma que el uso de esta planta ayuda de forma terapéutica a personas que sufren de dependencia al uso de opioides, en la mayoría de los casos formulados por enfermedades terminales y dolores crónicos, la marihuana ayuda a desescalar los niveles de consumo de opioides que son perjudiciales para la salud, cómo la morfina, la hidromorfona y tramadol.

Colombia no ha sido la excepción en cuanto a temas de polémica sobre la regulación del cannabis, el debate sobre la legalización en el País se ha basado desde la perspectiva moral sin tener en cuenta los estudios científicos y el impacto económico que trae el auge de la industria del cannabis. 

En el uso de esta planta se ha visto estigmatizado y degradado por parte de instituciones de gran peso en el país, como la iglesia, el estado y los medios, que en lo años setenta y noventa satanizaron el uso de la marihuana, asociándolo con vicio, pecado y crimen. Debido a todos estos conceptos prejuiciosos se creó una polémica sobre el uso de la planta.

 Fue recién en el siglo XX en que fue prohibida, convirtiéndose en un objeto de discordia política en casi todos los países occidentales. Desde la década de los noventa, han surgido, alrededor del mundo, varias iniciativas regulatorias que han despenalizado el uso del cannabis con fines terapéuticos, creando condiciones legales para su acceso. 

Un estudio de CNN en el 2016, revela que el cannabis  ayuda a tratar varias afecciones médicas cómo la epilepsia, el tourette, artritis,cáncer, glaucoma e incluso el cáncer, Este estudio también  afirma que el uso de esta planta ayuda de forma terapéutica a personas que sufren de dependencia al uso de opioides, en la mayoría de los casos formulados por enfermedades terminales y dolores crónicos, la marihuana ayuda a desescalar los niveles de consumo de opioides que son perjudiciales para la salud, cómo la morfina, la hidromorfona y tramadol.

Colombia no ha sido la excepción en cuanto a temas de polémica sobre la regulación del cannabis, el debate sobre la legalización en el País se ha basado desde la perspectiva moral sin tener en cuenta los estudios científicos y el impacto económico que trae el auge de la industria del cannabis. 

En el uso de esta planta se ha visto estigmatizado y degradado por parte de instituciones de gran peso en el país, como la iglesia, el estado y los medios, que en lo años setenta y noventa satanizaron el uso de la marihuana, asociándolo con vicio, pecado y crimen. Debido a todos estos conceptos prejuiciosos se creó una polémica sobre el uso de la planta.

 

Sin embargo, Colombia no está tan atrasado en temas de prescripción de cannabis medicinal, lo contrario, somos unos de los países que más fórmula cannabis medicinal a nivel mundial gracias al doctor Jorge Patiño Uribe, Médico Anestesiólogo de la Universidad del Rosario, especializado en manejo de dolor con más de 50 años de experiencia.

El doctor afirma que en un 80% de los casos, los resultados son positivos con respecto a fines terapéuticos y manejo de dolor, así se podrían tratar diferentes enfermedades sin causar daños colaterales o dependencia de opioides,  por esto, es importante este tipo de políticas públicas que promueven  su uso medicinal para proporcionar una vida más digna a personas con enfermedades terminales.

Es imprescindible, que los Colombianos  tengamos la capacidad de generar estos cambios de pensamientos y dejar a un lado prejuicios frente al consumo del cannabis ,mirando este consumo desde otra óptica, ya no desde la prohibición y el castigo, sino teniendo como base la pedagogía para gestar grandes avances en la ciencia, la medicina, la industria y la economía. 

Por otro lado también, tenemos que comenzar a pensar que la legalización del cannabis sea considerada como una opción y una oportunidad de política que busca abordar los problemas asociados a la producción y la distribución de drogas, el País llevas de 50 años inmerso en una constante guerra contra las drogas que lo único que ha generado son problemáticas sociales al interior del País. 

El Informe Mundial de 2010 de la Oficina Contra la Droga y el Delito de Naciones Unidas , señala que “el cannabis sigue siendo la sustancia ilícita más consumida en el mundo y estima que el consumo mundial oscila entre el 2,9 y el 4,3% de la población entre 15 y 64 años de edad.”Lo que confirma que la guerra contra el cannabis ha sido totalmente inutil a nivel mundial, por el contrario este tipo de políticas públicas son un círculo vicioso del cual solo se ven beneficiados unos cuantos.

La guerra contra las drogas sólo ha gestado una ola de violencia a lo largo y ancho de Colombia, la regulación del cannabis es una oportunidad para la industria y los campesinos que producen esta planta para su uso medicinal, es una oportunidad para que las personas que padecen afecciones médicas y psicológicas puedan tener una vida más digna, es una oportunidad para el desarrollo.

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Colombia: Huellas en el Territorio